Posted on febrero, 17 2022

Desde hace alrededor de 35 años, cada 19 de febrero se conmemora el Día Mundial de las Ballenas, una fecha clave donde la Comisión Ballenera Internacional (CBI) dio inicio a la prohibición de la caza indiscriminada comercial de estos cetáceos.

Chile, es uno de los países que conforma la CBI, por lo tanto, es una de las naciones en donde la caza de ballenas es ilegal. Una decisión consciente porque en nuestra costa de más de 6.000 kilómetros habita el 43% de las especies de cetáceos, es decir, alrededor del 50% de las especies marinas conocidas a nivel mundial.
En las playas del territorio nacional podemos ver varias ballenas, algunas de ellas y las más observadas, son: la ballena azul (Balaenoptera musculus), la ballena jorobada (Megaptera novaeangliae), la ballena fin (Balaenoptera physalus) y la ballena sei  (Balaenoptera borealis).

En este día de concientización y conocimiento sobre las ballenas te enseñamos algunas de sus diferencias.

¿Sabías que la ballena azul es el animal más grande que habita nuestro planeta? Esta ballena puede llegar a medir 30 metros y pesar 200 toneladas, el equivalente a 33 elefantes. Su corazón es del tamaño de un automóvil, y en su alimentación diaria debe comer alrededor de cuatro toneladas de krill. Además, es uno de los animales más ruidosos, si entendemos ruidoso como el que produce el sonido más fuerte según el Zoológico Nacional Smithsonian en Estados Unidos, sus llamados alcanzan 188 decibeles, mientras que un jet solo alcanza 140.

Esta ballena se encuentra en todos los océanos del mundo, y migra según la época del año y su ciclo reproductivo. En la población presente en el sur del país, las ballenas azules tienen la particularidad de emitir una vocalización única en el mundo, la cual solo se puede escuchar alrededor de esas aguas, específicamente en el Golfo Corcovado y alrededor de Galápagos.

Al menos el 10% de los ejemplares de ballena azul que quedan en el hemisferio sur se congregan en las cercanías de la isla de Chiloé durante el periodo estival, según un estudio apoyado por WWF y realizado por el Centro Ballena Azul. Por lo mismo, el Golfo de Corcovado y Chiloé es la zona donde existe mayor cantidad de avistamiento de ballenas azules en todo el hemisferio sur.

¿Sabías que la ballena jorobada es la más acrobática de las ballenas y la única que puede realizar saltos fuera del agua con todo su cuerpo? Esta especie se distingue del resto por la presencia de protuberancias carnosas en el rostro. Su cuerpo es de color negro o gris oscuro en el dorso, con áreas blancas de tamaño variable en las zonas ventrales y laterales en las aletas pectorales. Incluso, pueden ser distinguidas por el patrón de color blanco y negro en la zona central de su cola.

Pueden llegar a medir un máximo de 18 metros y pesar entre 40 a 45 toneladas. Las hembras tienen un mayor tamaño que los machos de alrededor de 1 a 1,5 metro más grande en la etapa adulta. En nuestro país uno de los mejores lugares para ver ballenas jorobadas es en el Parque Marino Francisco Coloane, a unas siete horas en barco desde Punta Arenas.

¿Sabías que en zonas de alimentación pueden verse hasta 100 ejemplares dispersos de ballena fin? También conocida como ballena de aleta o rorcual común, esta especie es el segundo cetáceo más grande después de la ballena azul, llegando a medir entre 19 a 24 metros y pesar 80 toneladas. La pigmentación de su cuerpo es gris oscuro en el dorso y costados, mientras que la superficie ventral, las aletas pectorales y la aleta caudal son de color blanco.

Tiene una característica muy inusual debido a que su mandíbula inferior derecha es de color blanco, y la izquierda es negra. Esta parte cercana a su boca es lo que hace fácil su diferenciación de otras ballenas. Recorre todos los océanos, y especialmente en Chile se ha visto a lo largo de toda la costa.

¿Sabías que la ballena sei es probablemente la más rápida de todas? Alcanzando una velocidad de 48 km/hr. Estos cetáceos habitan en todos los océanos y mares, excepto en las regiones tropicales y polares.
El dorso es de color gris oscuro, marrón o negro con unas zonas más clara detrás la cabeza conocida como “chevron”. El lado derecho de la mandíbula al igual que el vientre es blanco. Pesa alrededor de 40 a 50 toneladas y mide entre 18 a 24 metros de largo. Un dato interesante es que su aleta dorsal aparece unos segundos después de que la ballena sople.

Si bien, las ballenas tienen diferentes características entre sí, las problemáticas que ponen en peligro a la especie son compartidas en común.
Una de las principales razones de la disminución de la población de ballenas a nivel mundial fue su caza indiscriminada durante el siglo XX. Actualmente, esta práctica esta erradicada en gran parte del mundo, sin embargo, en algunos países aún se realiza, como en Japón, Noruega e Islandia. 

Otra de las problemáticas más recurrentes son las colisiones con embarcaciones marinas que las dañan, mutilan o les causan la muerte. También, los barcos afectan el sistema auditivo de las ballenas, el cual usan para navegar, buscar comida y comunicarse con otros de sus especies, lo que provoca que no puedan encontrarse entre sí para reproducirse, cuestión que incide directamente en el aumento de la población. Ante las alteraciones que sufren a raíz de este medio de transporte los cetáceos suelen desorientarse, sintiendo miedo o estrés, incluso varamiento en las playas.

La industria pesquera también se ha transformado en una amenaza para las ballenas, especialmente por la pesca incidental y el enmallamiento en redes que representan la tasa de mortalidad más alta de cetáceos a nivel mundial. Por otro lado, áreas con presencia de salmonicultura en el sur de nuestro país son un problema para el tránsito de las ballenas y los diferentes cetáceos, debido a que el espacio disponible para desplazarse se ve reducido. Además, en ocasiones algunas ballenas han quedado enredadas en las estructuras, lo que les termina causando la muerte.

Sin duda, la contaminación del mar también afecta a las ballenas, especialmente porque ingieren plásticos que terminan dañando su organismo interno. Un ejemplo de esto es el plástico de un solo uso que es el responsable de las mayores muertes por obstrucciones gástricas. Sin ir más lejos, una investigación de WWF arrojó que actualmente, más de 11 millones de toneladas métricas de este material llegan cada año a los océanos, calculándose que para el 2050 exista más plásticos que peces en el mar. En el mismo sentido, los indicadores mostraron que una ballena varada habría ingerido 135 artículos plásticos (el número más alto registrado para la especie), encontrando principalmente bolsas desechables, las cuales habría confundido con alimento.
Por eso, este Día Mundial de la Ballena es una gran instancia para concientizar sobre las afectaciones que están sufriendo los gigantes de los océanos, y de la misma forma, nos enseña sobre sus características y a como reconocerlas.