Existen 18 especies de estas aves marinas no voladoras, las que habitan casi en su totalidad en el hemisferio sur, cada una de ellas adaptada a una determinada condición climática.
Los pingüinos, cuyo Día Mundial se celebra hoy, pasan la mayor parte de su vida en el océano, buscando su alimento bajo la superficie marina, lo que supone la clave para su supervivencia. El aumento que la temperatura oceánica ha sufrido en los últimos 50 años ha afectado directamente tanto en la cadena alimenticia como en el ecosistema de esta ave.
Producto del cambio climático, se han producido deshielos y desprendimientos de glaciares, alterando el proceso de reproducción para gran parte de las especies de pingüinos, y también el espacio que les proporciona protección ante predadores. Esto ha dado como resultado una disminución en algunas colonias.
Conductas y señales
Mientras especies de pingüinos como los Papúa (Pygoscelis papua) o Pingüinos Juanito, que no gustan del hielo marino y habitan en zonas más cálidas alimentándose principalmente en tierra continental se expanden hacia el sur. Debido a la disminución de superficies cubiertas por hielo, especies como la Adelia (Pygoscelis adeliae), cuyo avistamiento es señal de hielo en las cercanías, hoy ven mermada su población producto de los derretimientos en las zonas que habitan.
Debido a que los pingüinos anidan en tierra y su plumaje negro puede distinguirse del blanco de la nieve, son muy sencillos de rastrear para georreferenciarlos y recopilar información que evidencie cambios en el ecosistema
Pingüinos en Chile
De las 18 especies que existen en todo el mundo, nueve están presentes en territorio chileno, entre ellos principalmente el de Penacho amarillo y Magallanes, los que se encuentran en el Chile continental, así como el pingüino de Humboldt, que habita entre Arica y el Archipiélago de Chiloé. Mientras que en la península Antártica se encuentra una mayor población de Papúa, Adelia y Barbijo.
Los pingüinos, cuyo Día Mundial se celebra hoy, pasan la mayor parte de su vida en el océano, buscando su alimento bajo la superficie marina, lo que supone la clave para su supervivencia. El aumento que la temperatura oceánica ha sufrido en los últimos 50 años ha afectado directamente tanto en la cadena alimenticia como en el ecosistema de esta ave.
Producto del cambio climático, se han producido deshielos y desprendimientos de glaciares, alterando el proceso de reproducción para gran parte de las especies de pingüinos, y también el espacio que les proporciona protección ante predadores. Esto ha dado como resultado una disminución en algunas colonias.
Conductas y señales
Mientras especies de pingüinos como los Papúa (Pygoscelis papua) o Pingüinos Juanito, que no gustan del hielo marino y habitan en zonas más cálidas alimentándose principalmente en tierra continental se expanden hacia el sur. Debido a la disminución de superficies cubiertas por hielo, especies como la Adelia (Pygoscelis adeliae), cuyo avistamiento es señal de hielo en las cercanías, hoy ven mermada su población producto de los derretimientos en las zonas que habitan.
Debido a que los pingüinos anidan en tierra y su plumaje negro puede distinguirse del blanco de la nieve, son muy sencillos de rastrear para georreferenciarlos y recopilar información que evidencie cambios en el ecosistema
Pingüinos en Chile
De las 18 especies que existen en todo el mundo, nueve están presentes en territorio chileno, entre ellos principalmente el de Penacho amarillo y Magallanes, los que se encuentran en el Chile continental, así como el pingüino de Humboldt, que habita entre Arica y el Archipiélago de Chiloé. Mientras que en la península Antártica se encuentra una mayor población de Papúa, Adelia y Barbijo.
